¿Te imaginas que un informe del Centro Nacional de Estadísticas Educativas de 2019 muestre que cerca del 20% de los estudiantes sufren acoso en un solo año escolar? Pero ¿por qué los niños acosan?
El acoso puede tener implicaciones sociales a largo plazo tanto para el acosador como para la víctima y, por lo tanto, conocer las razones por las que los niños acosan es el primer paso para prevenirlo.
En este artículo, analizaremos las características que pueden indicar que un niño está siendo acosado, los efectos y, lo que es más importante, las medidas que los padres pueden tomar para prevenir o afrontar el acoso.
Tipos de acoso
El acoso no es una experiencia agradable y lo triste es que puede ocurrir de muchas maneras diferentes. A continuación se muestra un desglose de algunos de los tipos más comunes:
- Acoso físico
Es el tipo más fácilmente reconocible. Consiste en utilizar la fuerza contra una persona para causarle dolor, como golpear, empujar, abofetear, arrojar un objeto o privar a otra persona de algo que le pertenece.
- acoso verbal
Esto implica el uso de palabras para causar dolor a alguien. Pueden ser insultos, amenazas, burlas, insultos raciales u homosexuales y difundir rumores sobre el estudiante objetivo.
- Social intimidargramo
Este tipo de acoso se produce cuando alguien queda excluido de un grupo o de una actividad. Alguien puede ser atacado porque los acosadores quieren que esa persona no sea agradada, ignorada durante los juegos y fiestas, o rechazada por todos.
- ciberbullying
Se trata de utilizar plataformas tecnológicas para acosar u ofender a una persona. Esto puede incluir enviar mensajes de texto o correos electrónicos groseros, compartir fotos o videos degradantes o acechar a una persona a través de cuentas falsas.
¿Los acosadores son naturalmente agresivos?
Los acosadores no son personas agresivas de nacimiento. Aunque algunos de ellos pueden tener rasgos más agresivos, el acoso no es un simple hecho, sino que es el resultado de varios factores.
Es probable que la mayoría de los niños que intimidan a otros estén bajo presión o enfrenten adversidades personales, sociales o ambientales.
Es importante comprender esta complejidad, especialmente cuando analizamos algunas de las causas por las que los niños acosan a otros.
Reconocer el hecho de que el acoso no es sólo una manifestación inevitable de agresión permite enfoques más preventivos y curativos del acoso.
Razones por las que los niños acosan a otros
Los motivos detrás del acoso infantil pueden resultar sorprendentes. A veces ni siquiera se trata de ser desagradable o cruel. He aquí por qué algunos niños se involucran en el acoso:
- Poder, atención y control: El acoso puede atribuirse a factores como la dominación o la afirmación de poder o la necesidad de atención. Para ellos, la sensación de poder y control puede resultar realmente satisfactoria y abrumadora.
- Baja autoestima: El acoso puede deberse a factores como el miedo, la baja autoestima y muchos otros. Al insultar a los demás, tienen la oportunidad de experimentar satisfacción y pensar que son superiores a alguien.
- Presión de grupo y celosy: Algunos de los niños desarrollan tendencias a ser acosadores para poder ser aceptados en su grupo. Los niños también pueden estar motivados por los celos de otro niño de la multitud por tener mejores cosas.
- Ambiente familiar e influencias sociales.: Quienes están expuestos a la violencia en el hogar probablemente se conviertan en acosadores. De manera similar, un entorno que acepta o incluso fomenta el acoso genera agresores.
- Mecanismo de supervivencia: No es raro encontrar que algunos de los niños que acosan también estén experimentando algún tipo de estrés o trauma. También puede ser una forma incorrecta de lidiar con emociones encontradas en una relación.
- Malentendido de las señales sociales.: Muchos de ellos están en una edad en la que son incapaces de comprender los distintos escenarios que pueden ocurrir y muchas veces terminan siendo acosadores. Por ejemplo, la creencia errónea de que sólo involucrarse en el comportamiento de intimidación de sus compañeros implica una verdadera amistad.
- Deseo de popularidad: Para ellos, podría verse como algo "cool" o una cierta forma de comportamiento aceptable realizado sólo para mandar a los demás.
Los efectos negativos a largo plazo del acoso
El acoso no sólo se expresa físicamente sino también emocional y psicológicamente. Los efectos del acoso pueden ser muy cercanos y de gran alcance en la vida de los niños, ya sea como víctima o como agresor, por lo que los padres no deberían tomárselo a la ligera.
Para las víctimas:
- Problemas de salud mental: algunos de los efectos potenciales de la victimización incluyen baja autoestima, aislamiento social y desgana o dificultad para confiar.
- Rendimiento académico: el acoso escolar afecta la concentración y el compromiso de los niños con la escuela y, por lo tanto, es probable que abandonen los estudios o tengan un rendimiento deficiente.
- Desarrollo social: También conduce al hecho de que las víctimas tienen bajas habilidades de funcionamiento de relaciones interpersonales porque temen ser rechazadas o acosadas aún más.
- Autoestima: Se observa que el acoso escolar resulta en un ciclo negativo continuo, que no permite que el niño construya una autoestima positiva.
Para los matones:
- Problemas de relación: un acosador puede tener poca capacidad para establecer relaciones saludables con los demás como resultado de comportarse agresivamente.
- Riesgo de abuso de sustancias: es más probable que los acosadores utilicen sustancias como drogas y alcohol para lidiar con problemas que los convierten en acosadores.
- Problemas legales: Tal manifestación de comportamiento en los estudiantes puede resultar en acciones criminales en el futuro.
Señales de que su hijo podría estar siendo acosado
Lamentablemente, la mayoría de los acosadores trabajan entre bastidores y es difícil para los niños denunciar los casos a las autoridades. Aquí hay algunas señales de advertencia que podrían indicar que su hijo está siendo acosado:
Cambios de comportamiento:
- Evitar a las personas cercanas o a los eventos sociales que alguna vez les resultaron agradables.
- Mayor ansiedad o miedo.
- La aparición de nuevos síntomas, abstinencia, llanto constante o irritabilidad.
- Disminución del enfoque en la escuela o disminución del rendimiento académico.
- Fingirse como enfermo para faltar a la escuela o ciertos eventos/situaciones.
Signos físicos:
- Lesiones, cortes, moretones o posesiones dañadas sin causa aparente.
- Sangrados nasales, tos, dolor de cabeza o de estómago y otras molestias con demasiada frecuencia.
- Dificultad para dormir o pesadillas.
- Pérdida de apetito o ganas de comer más que nunca.
Signos sociales:
- Daños a artículos personales como libros, productos electrónicos o joyas.
- Llegar con hambre a casa porque se saltaron el almuerzo en la escuela.
- Elegir un camino más largo y diferente para llegar a casa desde el colegio.
- Mantener el secreto sobre lo que ocurre en la escuela o en Internet.
Signos emocionales:
- Baja autoestima o pensar negativamente sobre algo o quizás sobre uno mismo.
- Sentirse menos ayuda o desesperado.
- Dificultad para concentrarse o concentrarse.
- Experimentar mayores niveles de frustración o ira.
Es importante que los padres comprendan que si ven tales señales, no necesariamente significa que deba ocurrir acoso, pero no deben ignorarlas.
¿Qué pueden hacer los padres para ayuda a lidiar con los acosadores?
La paternidad implica ser una protección para su hijo, y esto incluye protegerlo del vicio del acoso.
Aquí hay algunas estrategias calificación para abordar el acoso, ya sea que su hijo sea un objetivo o muestre un comportamiento de acoso:
Si su hijo está siendo acosado:
- Comunicación abierta: Haga que el ambiente sea propicio para que su hijo comparta todo lo que le sucede. Dígales que "está bien sentirse así" y trate de no descartar sus pensamientos o emociones.
- Trabajen juntos: Involucre a su hijo en la formulación de una estrategia calificación para manejar el problema del acoso. Debería conseguir ayuda de un maestro, consejero o administrador escolar para ayudar con este proceso.
- Empoderamiento: Aumente la confianza de su hijo y practique modales y técnicas para enfrentar a los agresores de manera segura.
- Documentación: Documente cualquier caso de acoso y asegúrese de que se grabar en detalle , incluida la fecha, hora y descripción del evento, si corresponde. Esto podría resultar beneficioso a la hora de presentar una denuncia sobre acoso.
- Considere ayuda profesional: si el acoso es bastante grave o su hijo tiene problemas para afrontarlo, se debe buscar un terapeuta.
Si su hijo está intimidando a otros:
- Aborde el comportamiento de inmediato: es importante no poner excusas para su hijo. En este caso, explique por qué el acoso es malo y tómese este asunto en serio.
- Ayuda a comprender el impacto: explíqueles cómo su comportamiento impacta negativamente o es perjudicial para los demás. Fomentar la empatía y la comprensión.
- Aborde los problemas subyacentes: puede haber alguna razón detrás de sus acciones, por ejemplo, baja autoestima y presión de grupo. Apóyelos para resolver estos desafíos.
- Refuerzo positivo: adopte un enfoque constructivo de la disciplina que enfatice el refuerzo positivo y la empatía.
- Considere la posibilidad de recibir asesoramiento familiar: la participación de un terapeuta puede ayuda encontrar la causa del problema y restablecer una forma saludable de resolución de conflictos.
Prevenir el acoso
- Valores anti-bullying: enséñele a su hijo a ser empático, respetar a los demás y tener buen corazón. Modele estos comportamientos usted mismo.
- Intervención de un espectador: eduque a su hijo sobre cómo actuar como testigo cuando se enfrenta a situaciones difíciles. Esto podría ir desde defender a alguien que está siendo acosado hasta denunciar el acto y/o al acosador.
- Concientización sobre el ciberacoso: explíquele a su hijo sobre el ciberacoso y las formas correctas de comportarse en Internet. Controles parentales debe considerarse como una herramienta para regular el uso de Internet por parte del niño.
- Monitoreo con un aplicación de control parental: Prestar mucha atención a las interacciones sociales de su hijo y al ciclo de sus amigos en su teléfono puede revelar la verdad, ya sea que su hijo esté involucrado como un acosador o esté siendo acosado.
Herramienta de monitoreo parental para protección adicional
El Aplicación FlashGet Kids ofrece importantes funciones de seguimiento para prevenir y detener el acoso en línea o fuera de línea:
- Monitoreo En Vivo : Cuenta con cámara remota y audio unidireccional para que puedas ver y escuchar el entorno de tus hijos. Una vez que detecte alguna señal de peligro, grabar y tome medidas inmediatas para proteger a su hijo.
- Seguimiento Ubicación: La mejor manera de proteger a su hijo es saber su paradero.
- Instantáneas: obtenga capturas de pantalla del teléfono de su hijo en tiempo real, que pueden capturar detalle que nunca antes había conocido.
- Duplicación De Pantalla: esta función muestra la pantalla del teléfono de su hijo en su teléfono para que pueda realizar sus actividades telefónicas de manera silenciosa y sin inconvenientes.
- Sincronizar notificaciones : puede recibir notificaciones en tiempo real desde el teléfono de su hijo, asegurándose de estar siempre informado sobre sus interacciones en línea .
Estas herramientas pueden informar a los padres y ayuda a involucrarse si hay un caso de acoso escolar.
Pensamientos finales
El acoso escolar es un fenómeno multifacético y los padres, los educadores y la sociedad en su conjunto deben ser conscientes y evitar que este fenómeno se produzca.
Al conocer el Causas detrás de los comportamientos agresivos de los niños., aprendiendo a identificar las señales de alerta del acoso entre los niños y aceptando que tiene consecuencias de gran alcance, podemos evitar colectivamente que nuestros seres queridos sufran esta injusticia.
Otras herramientas útiles como el aplicaciones de control parental También puede ayudar a monitorear y erradicar los incidentes de acoso.
Por favor, ten en cuenta que luchar contra el acoso no se trata sólo de defender a las víctimas. También se trata del desarrollo positivo de cada niño.